Últimamente me han llegado unas cuantas moléculas de inspiración a mi cerebro y se me han ocurrido algunas ideas de relatos, así que como me aburro las pondré aquí a ver qué tal os parecen.
Primera Idea
"Una tarde, salgo a la calle a comprar unas cosas. Así que me visto rapido, cojo mi chaqueta blanca y salgo a la calle. Cuando empecé a caminar, vi como un grupo de chicas iban por mi misma acera. Me di cuenta de que todas y cada una de ellas llevaba un chaleco rojo. No le di mucha importancia y seguí caminando. De repente, vi a un hombre ya entrado en años que también llevaba un chaleco rojo. Esto me extrañó más. Seguí caminando y me di cuenta de que todas las personas que veía por la calle tenían un chaleco rojo. Niñas y niños pequeñitos con chalecos rojos, ancianos con bastones con chalecos rojos, chicas de mi misma edad, e incluso chicos. A medida que iba caminando me iba preocupando más y más ya que desde que salí de casa no había visto ninguna persona que no llevase chaleco rojo.
La gente se quedaba mirandome extrañada cuando pasaba a su lado, incluso algunos me señalaban con el dedo. Todos se apartaban de mí cuando pasaba. Me sentía cada vez más y más extrañada. Todo el mundo llevaba chaleco rojo menos yo. De repente unos polícias me vieron (también con chaleco rojo) y salieron corriendo detrás de mí. Mi instinto me obligó a correr."
Segunda Idea
- Un día cualquiera me despierto. Me levanto, abro la puerta de mi habitación y salgo a la entrada. Me percato de que todo está extrañamente oscuro y silencioso, ya que estoy acostumbrada a ver a mi madre levantada y en movimiento, pero esta vez no es así. Como estoy bastante dormida me voy a la cocina. Entonces, escucho un bostezo y mi madre se levanta y enciende la luz. Le digo buenos días, pero no me contesta, ni siquiera me mira. Me extraño un poco y pienso que a lo mejor está enfadada por algun motivo. De repente, escucho pasos en mi habitación y veo aparecer a una Ana completamente igual a mí por la puerta de la cocina. Tiene mi mismo pijama, mi misma cara, mi mismo pelo. Todo es igual. Dice buenos días en la misma entonación y se aproxima a donde me encuentro. Parece como si no me viese. Y entonces, me atraviesa y se sienta en la mesa a tomarse unos cereales. Me asusto y grito a mi madre para que me oiga. Pero nada, contesta a la otra Ana. Me pongo histérica y voy corriendo a mi habitación donde YO llevaba durmiendo toda la noche.
Me pongo a llorar y me siento en el suelo de mi cuarto. Mientras, aparece mi gato, me mira y malla. Le quise acariciar pero vi como traspasaba su cuerpo. Vi como toda yo podía ser atravesada. Sólo mi gato me veía. Seguí llorando cuando de repente escuche un susurro que me llamaba: "Ana!" "Ana!"
Tercera Idea
Estoy en mitad del mar en un barco que va a la deriva. Es decir, lo controlo yo, pero no sé a dónde voy, ni qué quiero encontrar. De repente, miro al mar y veo un puntito. Navego hasta allí, y veo que es un hombre que se está ahogando. Entonces, me tiró al agua y nado hacia donde está él. Pero de repente, se le acerca un tiburón. El hombre empieza a gritar y a gritar. Nado todo lo rápido que me permiten mis aletas (las tenía puestas) y llego hasta donde se encuentra. El tiburón da rodeos intentando reconocer lo que tiene delante. Se acerca con intención de tocarnos. Yo cojo al hombre, le tapo la boca para que no grite e intento que se quede completamente quieto. El tiburón se acerca más y más y nos da un topetazo. Intento con todas mis fuerzas que el hombre no se mueva. Entonces, el tiburón se va por donde ha venido. Lo llevo al barco y le digo que se calme.
Lo dicho, son solo ideas de historias y ya veré cual escojo para meterme de lleno y hacer algo decente. Por ahora, va ganando puntos la segunda. Aunque claro, no tienen mucho que ver entre sí.
viernes, 1 de mayo de 2009
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